* The preview only shows a few pages of manuals at random. You can get the complete content by filling out the form below.
Description
Final Historia de la Danza. Clase 15/03 : “Danza e historia. La danza en la disciplina histórica” Articulo de bailarina, coreógrafa e investigadora Chilena Maria Jose Cifuentes “Acercamientos y propuestas metodológicas para el estudio histórico y teórico de la danza”, en Aisthesis. Revista chilena de investigaciones estéticas, N43, Santiago de Chile, Pontificia Universidad Católica de Chile, 2008, pp. 85-98. Guia de lectura: ¿ Porque para la autora la historia de la danza es una disciplina reciente? “La historia de la danza es una problemática reciente dentro de la disciplina histórica, su esencia fugaz y transitoria, es para el historiador una tarea difícil de reconstruir y más aún de interpretar, sobre todo por su esencia dinámica que la convierte en una fuente en movimiento, un documento que vive en el momento en que es interpretada y que luego sólo existe en la memoria de aquellos que crearon, ejecutaron y observaron.”
¿Cómo percibe el conocimiento de la historia de la danza en Latinoamérica?
“quienes se han encargado de rescatar la memoria de la danza han sido principalmente bailarines, al igual que en el resto del mundo, los historiadores todavía miran con recelo la posibilidad de considerar a la danza como un objeto de estudio, se repiten en Latinoamérica los prejuicios occidentales frente a su naturaleza como fuente histórica. Se espera que la historia integre a este arte en su investigación, de ser así muchos serían los aportes que se podrían recoger desde esta ciencia, principalmente porque la historia permite integrar modelos de interpretación que ayudan a la compresión de los hechos desde la perspectiva general de los procesos y otorgan las herramientas para generar periodifi caciones, etapas y clasifi caciones que superan las existentes, ampliando las posibilidades y quebrando con los conceptos que nacen hoy desde la negación de los estilos. Ahora bien la historia de la danza latinoamericana hoy, no sólo debe ser asumida bajo la estructura de un gran rompecabezas, las investigaciones históricas deben ser capaces de asumir una posición interpretativa, realizar un ejercicio, donde la danza pueda enfrentarse a su propia historicidad, donde se integre no sólo la imagen de una gran línea de tiempo sino que, además de ella, se puedan desprender una serie de posibilidades de análisis considerando tanto el contexto histórico que permite la creación de sus obras como también el discurso coyuntural que la sostiene.”
¿Cómo propone trabajar con la historia de la danza? “Un posible procedimiento sería elaborar un relato histórico guiado por el sujeto de investigación, es decir producir una historia de la danza desde la propia danza, realizando un análisis intertextual de los hechos, estudio interno que no se fi ja en lo que se dice de ella sino lo que ella dice de sí misma. Para realizar esto se deberían considerar, como eje del análisis, las distintas infl uencias que se van desarrollando a lo largo de su historia al interior de sus producciones, preguntando a sus creadores por
las alusiones dentro de las obras que hacen referencias a otras, identifi cando los criterios que se han ido formando en relación a los estilos existentes, partiendo de la premisa de que la danza va componiendo a favor o en contra de los cánones que ella misma va creando en el tiempo. Dentro de este esquema de análisis se deben tener presentes los tres elementos que forman la danza: coreógrafo, intérprete y público. Estos informan sobre la propia historicidad de la danza y permiten resolver los códigos intertextuales que se van desarrollando en sus distintas etapas. Esta misma idea puede aplicarse a su análisis estético ya que la intertextualidad también es un eje importante en torno a su filosofía.” “interrogar a la danza directamente, buscar en ella los datos que puedan aportar en relación al tema que se investiga, sea social, cultural, político, etc. La danza por su condición de obra de arte o simplemente por su presencia en la sociedad como manifestación humana es un retrato de época, en ella se advierten las distintas mentalidades del hombre en el tiempo, es un documento vivo que permite al historiador comprender el pasado. Como se ha visto, esta posibilidad ha sido la más difícil de razonar por los historiadores.” “Si bien ambas propuestas pueden ser trabajadas de manera independiente este artículo busca proponer la integración de ambas fórmulas metodológicas. La unifi cación del análisis intertextual con el uso de la danza como fuente permiten al historiador esbozar un panorama más completo frente al contexto en que ésta se desarrolla, trazando un puente entre la danza y la sociedad, lo que otorga una mayor comprensión de los fenómenos a los que se somete. Este ejercicio integrado permite elaborar lo que se sugiere como historia social de la danza, concepto que hasta ahora se había mantenido al margen si recordamos nuevamente la omisión de Hausser” ¿Qué nos entrega la danza? ¿Qué creen que puede aportarles una historia de la danza? Yo: Me resulto muy interesante poder leer y escuchar el análisis que plantea Maria Jose Cifuentes sobre la historia de la danza y sus problemáticas, son cuestiones que nos interpelan y que usualmente debatimos con compañerxs, docentes y colegas en general. Coincido plenamente con la autora que aunque como bailarines actualmente busquemos dejar registro tanto audiovisual como escrito sobre nuestras obras, clases, interpretaciones de la danza, etc (algo que me resulta de suma importancia para que la danza no solo se encuentre viva en el momento que es interpretada, y por suerte en la escuela de danza realizamos un trabajo y entrenamiento muy enriquecedor sobre el registro en danza) pero que al ser agentes directos de la historia de la danza es dificil tener un enfoque objetivo sobre la misma.
Por eso me llama la atención como historiadores no dan cuenta de la importancia de la interpretación de la danza como parte del arte, la cultura, las ideas de una sociedad y que permitiría comprender el contexto de una determinada época. Al igual que Maria Jose, considero que esta marginación de la danza en la historia tiene que ver con la invisibilizacion del cuerpo, el cuerpo considerado ajeno al desarollo de la razon, bombardeado de prejuicios, estructuras, esquemas que aún cuesta desarraigar. Otro planteo que propone Cifuentes es esta idea Eurocentrista de la danza... me hizo recordar una frase que un docente dijo una vez "Nos debemos todavía una danza contemporánea latinoamericana. Menos Pina y mas Wilson Pico". Creo que aunque busquemos desde el relato poder "nacionalizar" la danza contemporánea, aun nos falta repensar desde el movimiento lo que mostramos, lo que contamos con el cuerpo. Hay algo que genera la danza folklorica de nuestro pais que a mi me estremece, y creo que se trata de que estoy observando un cuerpo latinoamericano en movimiento. A veces siento que ya no alcanza con bailar descalzos, tenemos que meter las patas en el barro. La seguimos el lunes!!! un abrazo a todxs RESPUESTA DE MARTI- RESUMEN DEL TEXTO:
María José Cifuentes nos muestra un panorama de los cambios que fue sufriendo la historia de la danza, o mejor dicho la historicidad de la misma, que es prácticamente nula. Una disciplina que recién se está abriendo paso, una historia con un matiz fugaz y transitoria, posee una esencia dinámica que la convierte en una fuente en movimiento y que a su vez la transforma en una tarea difícil de reconstruir y de interpretar para los historiadores. Negada por los historiadores y la historia en general, la danza empezó a confeccionar su propia historia. Generándose desde los inicios del siglo XX una serie de textos que han intentado reconstruir la memoria de este arte, siendo así una serie de catastros informativos, un desarrollo de un relato que se funda desde la causa y el efecto. Teniendo varias equivocaciones o contras como por ejemplo una historia de la danza basada en intuiciones e ideas naturalistas que validan la presencia de la danza en el hombre como un acto propio de su condición humana sin considerar los contextos y los cambios profundos que en ella se desarrollan o escrita muy poco objetivamente o con información autobiográfica ya que sus principales “historiadores” son los mismos bailarines, coreógrafos y creadores. Finalmente, en Latinoamérica, en la década de los ´80 y ´90 empieza a surgir estudios que establecen un vínculo entre la danza como cuerpo de conocimiento y como
actividad académica, proponiendo la imagen de un estudio tridimensional en el momento de abordar una historia de la danza en el que se incluyen: los tipos de danza, la danza en el tiempo y los contextos que la generan. A partir de que surgen estos primeros registros se propone trabajar la danza desde dos perspectivas y una tercera que sería integrando las anteriores. La reconstrucción y catastros de obras y personajes y por otro lado las investigaciones y confección de teorías en torno a los catastros y clasificaciones son los pasos a seguir para el comienzo de esta disciplina, y los ejes en cómo tratarla pueden ser: elaborando un relato histórico guiado por el sujeto de investigación, es decir producir una historia de la danza desde la propia danza, realizando un análisis intertextual de los hechos, estudio interno que no se fija en lo que se dice de ella sino lo que ella dice de sí misma. O también se podría utilizar a la danza como una fuente, interrogarla directamente, buscar en ella los datos que puedan aportar en relación al tema que se investiga, sea social, cultural, político, etc. La danza por su condición de obra de arte o simplemente por su presencia en la sociedad como manifestación humana es un retrato de época, en ella se advierten las distintas mentalidades del hombre en el tiempo, es un documento vivo que permite al historiador comprender el pasado. Se busca a integración de ambas fórmulas metodológicas. La unificación del análisis intertextual con el uso de la danza como fuente permiten al historiador esbozar un panorama más completo frente al contexto en que ésta se desarrolla, trazando un puente entre la danza y la sociedad. Hacer una historia social es precisamente conjugar la propia historicidad de la danza con la historia de la sociedad que la sustenta lo que permite realizar un relato interpretativo que manifiesta además el vínculo entre la danza y los ejes sociales, culturales y políticos. En Latinoamérica la historia de la danza es una disciplina prácticamente nueva, que queda postergada, marginada quizá porque la danza manifiesta su presencia desde el lenguaje corporal lo que pocas veces puede ser entendido en una cultura marcada por la razón, quizá por esto misma fue marginada, por su propio soporte: el cuerpo, y también por su asociación a lo femenino y las inclinaciones patriarcales de nuestra cultura. Entonces su estudio, la historia y la teoría quedan postergadas a pequeños cursos optativos, manteniendo una idea de intérprete que destaca por su virtuosismo escénico y no por sus conocimientos. En conclusión, no existe un acercamiento concreto y de por sí la tarea de reconstrucción todavía no logra ser llevada a cabo en totalidad. En chile por ejemplo se busca dilucidar la existencia de una danza nacional, con elementos identitarios a partir del proceso de asimilación cultural que asume la danza chilena, conjugando los lenguajes extranjeros con la realidad cultural del país y es interesante que a partir de una historia podamos identificar de qué manera se fueron incorporando ideales nacionales y populares dentro de las obras de danza.
En el video Cifuentes plantea esta sociedad occidental y basada en la razón, y en el pensamiento, en dividir cuerpo y mente, en la modernidad y la productividad de los cuerpos y nos hacer replantearnos y utilizar a la danza como herramienta, como camino para unir mente y cuerpo, porque somos una unidad. La danza como conexión con nuestro cuerpo y el de otros, como MEDIO, para ayudar nuestra sociedad y también como investigación constante. Una historia de la danza nos permite interpretar una época, entendiendo a la obra como un espejo cultural y entender que su presencia en la sociedad occidental y Latinoamérica se remite a los orígenes de las primeras civilizaciones, la danza siempre formo parte de nosotros. El objetivo de aprender historia de la danza es poder llegar a un proceso de interpretación que nos permita la elaboración de una historia social.Nos permite generar un análisis considerando tanto el contexto histórico que permite la creación de sus obras como también el discurso coyuntural que la sostiene.
Clase 29/03: Trabajo escrito Conceptos copados: “Cuerpos humanos en movimiento, produciendo juntos la tarea de imaginar, ejercer y recrear movimientos, eso es la danza. Y así debe ser considerada cuando se cuenta su historia de manera interna, por mucho que sus funciones sociales, o sus temáticas, vestuarios, puestas en escena o músicas incidentales, la acompañen y sean para ella, en diversos grados, inseparables” Carlos Perez Soto- sobre la definición de la danza como forma artística “Por último, notemos que en este concepto interno de danza caben sin difi cultad dos prácticas sociales que, por otras razones, es necesario distinguir: la danza como arte y el baile común —que socialmente cumple otras funciones.9 En el caso de la danza como arte lo relevante es que la experiencia estética dancística deriva de estas connotaciones internas (el movimiento, la cocreación) y no de la temática, la música o la puesta en escena o, al menos, deriva del modo en que esa temática o puesta en escena o música se expresa o infl uye en el movimiento. En el caso del baile y sus muchas funciones sociales la consideración interna debería proceder del mismo modo, y sólo desde allí prolongarse a sus signifi caciones sociológicas o antropológicas.” Estetica de lo bello: “En general las discusiones internas de esta «estética de lo bello» tienen que ver con que si la belleza está más en el objeto o más bien en el acto de captar del sujeto y, de manera correspondiente, si es más objetiva y universal o es más bien subjetiva y sólo puede darse en la experiencia particular. Se discute también si el placer asociado a la experiencia estética es de tipo intelectual o está relacionado con las pasiones, más «altas» o más «bajas» según distintos teóricos. No es lo mismo el placer según el
espiritual Platón, o según el muy práctico Hume, que lo que diría en cambio el truculento Freud.” Estetica de la expresión: “Lo que constituye a una obra de arte es el hecho de que exprese la subjetividad humana, idea a la cual puede llamársela «estética de la expresión». En esta idea el arte es esencialmente un modo de comunicación y la obra alcanza su objetivo profundo cuando logra «decir» algo.” “Desde luego esta estética da cuenta de un concepto acerca de qué es lo bello, el cual depende, en general, de la idea romántica de conmoción. No obstante, aquí lo bello no se ve como un universal objetivo (o, al menos, es tan universal o no como puedan serlo las emociones humanas), ni menos como una condición para el arte. La estética expresiva admite un arte «feísta», con la condición de que resulte de algún modo conmovedor. “ Estetica de señalamiento: “A lo largo del siglo XX se constituyó, por último, algo que se podría entender como una «estética del señalamiento», centrada en la idea según la cual algo es considerado como arte, en realidad, al ser señalado como tal.” “En esta estética el énfasis se encuentra más en la relación entre la obra y el público que entre la obra y su creador. El gesto de recreación, ejercido por el espectador, el gesto de situar o desmarcar obras de sus contextos supuestos tradicionalmente, o de los materiales que se le prescriben como naturales o dados, resultan más relevantes que la función expresiva o comunicativa. Si los partidarios de la estética de la expresión lograron explorar y ampliar los medios expresivos de cada arte, los que practicaron la estética del señalamiento llamaron en general a problematizarlos y transgredirlos. Si los primeros profundizaron lo propio de cada disciplina artística, estos otros buscaron transgredir los límites entre cada disciplina y las otras.” “Las categorías deben ser usadas más para referir aspectos, tendencias o tensiones que universos cerrados y compactos” ACADEMICISMO, MODERNISMO, VANGUARDISMO: “(Petipá en el académico, Graham en el moderno, Trío A como obra de vanguardia)” “Desde un punto de vista historiográfi co no es arriesgado decir que la época y el lugar propio del estilo académico es la corte rusa entre 1870 y 1910, que en el estilo moderno los equivalentes son la danza alemana entre 1920 y 1935, y la danza norteamericana entre 1930 y 1950. La única vanguardia como tal en danza es el movimiento post moderno en Estados Unidos entre 1960 y 1976” Academicismo: “ Hay academicismo, como tendencia, cada vez que se privilegia una corporalidad particular, caracterizada por la fuerza, la destreza, las convenciones de la levedad, y un ejercicio articulado del movimiento. Cuando se tiende a hacer invisible la
respiración, la transpiración, el esfuerzo. Cuando la destreza gimnástica se trabaja con mayor énfasis que la expresividad. Cuando aparece o se pone un énfasis particular en la técnica, ya sea como técnica de enseñanza, de ejecución o de composición. Hay academicismo en la puesta en escena cuando se privilegia notoriamente la danza por sobre la integración o fusión de las artes, cuando se introduce lo decorativo o el énfasis en la musicalidad estricta. Hay también academicismo cuando se tiende a una estética de lo bello, con gran énfasis en la visualidad y con un cuidado particular por la simetría y el equilibrio.” Modernismo: “Hay modernismo, como tendencia, cada vez que se enfatiza la fl exibilidad y la fl uidez corporal por sobre la hegemonía de la técnica, cuando se enfatiza el trabajo con el peso, en y hacia el piso, cuando se privilegia la expresividad por sobre la destreza corporal y las simetrías visuales. Cuando se pone un cuidado particular en la integración de las artes en la escena, y se procura dar realce al contenido a través de esa integración. Cuando se tiende a disminuir los elementos decorativos y los protagonismos centrados en destrezas para enfatizar la efi cacia narrativa y la fl uidez y coherencia de las obras” Vanguardismo o posmodernismo: “Hay vanguardismo, como tendencia, cada vez que se impugnan de manera radical las convenciones generales que enmarcan a los estilos académico y moderno, y que delimitan también a la danza como arte en la modernidad. En primer término las convenciones en torno a la corporalidad y el movimiento. Cuando toda corporalidad se considera válida, dentro y fuera del arte, cuando todo tipo de movimientos se consideran como recursos posibles. Hay vanguardismo cuando se tienden a borrar las diferencias entre el espacio escénico y el público, entre el arte y la vida, entre las diversas artes. Cuando se impugnan las relaciones jerárquicas entre coreógrafos, intérpretes y públicos. Cuando se plantean cuestionamientos radicales a las lógicas de lo bello y lo expresivo.”
Foro 3: Texto Susana tambutti: Autonomía en danza: “Desde el comienzo de su concepción como disciplina artística, la danza inició su experiencia de autoconocimiento tomando, paulatinamente, conciencia de sus posibilidades y desterrando cualquier dependencia hasta convertirse en protagonista de su propia historia. Este protagonismo sólo pudo alcanzarse de manera completa una vez conquistada su madurez espiritual, es decir, su completa autonomía artística, manifestada en la posibilidad de conferirse su propia ley.2 La capacidad ejercida por la danza para autodeterminarse era el único modo en que podía verifi carse el cumplimiento del objetivo de la modernidad, porque sólo mediante este logro podía establecerse como arte independiente y desarrollar discursos teóricos propios, eligiendo su propio plan, sin copiar metodologías compositivas adecuadas a otros
medios expresivos y sin ser ilustración de la literatura o visualización de la música. En consecuencia, el cumplimiento de la autonomía implicaba que la danza sólo obedeciera su propia intencionalidad artística, prescindiendo de infl uencias externas.”